Una pregunta muy común, ya que sí no se hace correctamente puede dar más de un quebradero de cabeza, es el cambio de titularidad de un vehículo en caso de fallecimiento del titular, ya que en ningún caso hay que conducir un coche cuyo titular haya muerto, ya que nos puede acarrear multitud de problemas tanto legales como con el seguro en caso de que tengamos cualquier tipo de golpe o accidente.
Es por eso que ante un fallecimiento tenemos que tramitar la solicitud de cambio de titularidad en un plazo de 90 días, y adjuntar la documentación necesaria para ello, especialmente si tras el fallecimiento del titular el vehículo aún no se encuentra adjudicado por herencia o por últimas voluntades a un familiar en concreto.
El reglamento de vehículos establece en su artículo 32. 6 la transmisión de un vehículo por fallecimiento de su titular registral, Este trámite se tiene que realizar en la Jefatura de Tráfico correspondiente.
Hay que presentar la siguiente documentación:
- Impreso de la solicitud de cambio de identidad
- Pago de la tasa de 53,40€ a excepción de los ciclomotores, cuyo coste es de 26,70€.
- Certificado defunción del titular o libro de familia
- Documentos de identidad
- Carnet de conducir o licencia de conducción.
- Acreditación de la posesión del vehículo.
- Tarjeta ITV o ficha técnica del vehículo y pago de la tasa correspondiente.
De esta manera el vehículo pasará de forma provisional a la titularidad del poseedor hasta su adjudicación hereditaria. Pasando a ser definitiva en ese plazo de 90 días no está correcto y tras presentar en la Jefatura de Tráfico correspondiente la liquidación o exención del Impuesto sobre Sucesiones y Donaciones y la declaración de herederos o testamento en el que conste la adjudicación del vehículo al nuevo titular.
Esto que en un principio puede ser un trámite sencillo puede complicarse en caso de no haber herencia, ni certificado de últimas voluntades, ya que de ser así el coche debería ser partido entre todos los herederos lo cual puede complicar el trámite, por lo que para que sea lo más rápido y llevadero posible y ahorrarnos problema nunca está de más acudir a profesionales que realicen por nosotros el cambio de titularidad del vehículo de un fallecido.
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